Junto al reconocido grupo Mazapán, el ensamble convocado por el flautista Rodrigo García y el violinista Gonzalo Pinedo bajo el nombre de Zapallo, es una de las columnas más firmes y estables en la música infantil. Con una historia prolífica en cuanto a composición original, recopilación de material y grabación de discos desde los inicios de la década de 1980, sus canciones dibujaron la escenografía colorida y construyeron la imaginería para sucesivas generaciones de niños.
Adscrito a la música acústica dirigida a niños de entre 2 y 7 años, Zapallo realizó un largo trabajo en la creación de piezas originales y recopilación de material anónimo de rondas infantiles y otras canciones. Su labor siempre estuvo enfocada a la enseñanza didáctica más allá de la simple recreación infantil, incorporando instrumentos nobles, y armonías y arreglos algo más avanzados que aquellos acostumbrados para los oídos de un niño común. Melodías como “Las vaquitas”, “El ratón Febelón”, “La polilla palomilla” y la conocida “Expresar” fueron parte de sus mejores momentos musicales.
Una primera etapa se extendió entre 1983 y 1993, con la dirección musical de Pinedo y luego de Jorge Hermosilla. Durante esos años, Zapallo sez latinoamericana, trabajó intensamente con los textos y la música del compositor Oscar Aguilera y vivió el paso de una serie de músicos en sus filas. En 1991 participó en la competencia folclórica del Festival de Viña del Mar, defendiendo la canción “De principio a fin”, que quedó entre las cinco finalistas.
En 1993, el profesor Oscar Pino tomó la dirección musical y el grupo consiguió una fisonomía definitiva, estableciéndose como quinteto acústico con Enrique Torreblanca (guitarra), María Paz Herrera (voz y cuerdas) y Loreto Valjalo (voz y flauta traversa), más García en las flautas dulces. La formación de esta segunda etapa trabajó con composiciones propias y los textos de la escritora y poeta María Luisa Silva, al tiempo que transfirió al lenguaje de la música infantil material de compositores como el argentino Eugenio Inchausti y el brasileño Chico Buarque.